De Roquefort y Mosqueteros (minicakes de queso)

Si hay una película que me gustaba de pequeña era Los tres mosqueteros. Sí, película mala donde las haya, pero es una de esas pelis que ves mil veces cuando eres pequeña y le coges hasta cariño. Esa época en la que Chris O'Donell te parece maravilloso y luego cuando te haces mayor te da hasta asquirri. ¡¡Que tenía más cara de niña que algunas de mi clase!! Ahora parece que ha mejorando pero no sé si me convence demasiado. Entre esta de los mosqueteros, esa de amor que hizo con Drew Barrymore y las que hizo con mallas en las de Batman... chico, que conmigo tienes jodio que te siga en twitter.

Bueno, el caso es que la película me gustaba de pequeña y ahora si la dan en la tele algún sábado o domingo (de esos tontos que te tiras en el sofá a echar la siesta antes de salir o decides hacer domingo-dominguero), pues hasta la veo. Todo en la peli es malo, pero hay que reconocer que es una peli mala de esas que tiene un punto cutre que gusta. Esa Rebecca De Mornay de mala tatuada, Charlie Sheen de cura playboy (el único papel que sabe representar) y Kiefer Sutherland como el mosquetero bueno luchando contra los malvados... Menos mal que luego se fue a 24!! Es que no hay un personaje que se salve. El Cardenal Richelieu, con Tim Curry siempre con esa sonrisa que me pone los pelos de punta.
La novia de D'Artagnan con Judie Delpy que sale como 4 minutos contados en la peli y no hace nada más que darle la mano a Chris O'Donnell tirado en unas escaleras. Esa es otra actriz de esas que no soporto. Ese rollito de cine independiente me pone mala. Bueno todos tenemos un pasado y no hay que renegar de él.

Pues una de mis frases de cine favoritas (cada uno con sus gustos) es cuando Portos, el mosquetero gordi, le dice al malvado de Rochefort que "apesta como el queso que lleva su nombre". Jajaja!! Sí, tengo un humor muy simple. Ya lo iréis comprobando con el tiempo. Y cada vez que como o veo queso roquefort me acuerdo de esa frase y de esta película. Así que le dedico mi receta de hoy por los buenos ratos que me ha hecho pasar con la frase del roquefort.



Minicakes de roquefort, peras y nueces

Ingredientes para 6 minicakes:

- 120 g de harina
- 70 ml de leche
- 70 ml de aceite
- medio sobre de levadura en polvo
- 2 huevos
- sal, pimienta
- 50 g de queso roquefort
- un pera
- un puñado de nueces

Elaboración:

Precalentar el horno a 180ºC. Pelar la pera y partirla en trocitos. Desmenuzar el queso y partir las nueces. En un bol grande se baten los huevos y se mezclan con la leche y el aceite. Se echa una pizca de sal y de pimienta. Se mezcla incorporando poco a poco la harina y la levadura hasta que no queden grumos. Se echan a la mezcla el queso roquefort, la pera y las nueces y se hornean durante aproximadamente 30 minutos.

Y no puedo despedirme sin decir que lo mejor de la peli es la canción del final:  All for love de Bryan Adams... otro grande de las pelis de los 90. Soy fan!!

On egin!

Suley

De caminos y vieiras (vieiras con cítricos)

Estos días mi madre ha empezado el Camino de Santiago desde Roncesvalles y me he acordado de cuando lo hice el año pasado. Es una experiencia increible.Yo empecé en León porque no tenía más días pero me quedé con las ganas de hacerlo desde Ronces o desde Francia, como el protagonista de la película El camino (The way). 

La película (no apta para los que aborrezcan a la familia Sheen) nos cuenta la historia de un padre y un hijo a los que El Camino une de una forma especial. Podria decirse que es casi una guía turística del camino francés, ya que etapa a etapa te van enseñando los distintos pueblos que podemos encontrarnos en los más de 700 km, pero merece la pena verla. Yo ya tenía en mente hacer el Camino. Soy muy de monte, pero fue esta peli la que me animó finalmente.

Al igual que en la pelicula, en el Camino te encuentras con gente maja, rara, pasta, jóven, mayor... Hombres y mujeres de todas las nacionalidades posibles que se encuentran en estos caminos y viven una experiencia única de formas diferentes. Unos por temas religiosas, otros espirituales, por deporte... hay miles de historias. Lo mejor de todo es que te das cuenta de la capacidad de superación que tenemos las personas.

Uno de los símbolos más característicos (por no decir el más) es la famosa concha de vieira que identifica a los peregrinos que van a Santiago. No las pude comer cuando llegúe a la meta (comí una empanada de pulpo de muerte, otro día la receta) pero las vieiras me encantan, asi que os dejo con una receta de vierias peregrinas y os animo a que alguna vez hagáis el Camino, aunque sea algunas etapas.

Vieiras peregrinas con cítricos

Ingredientes para 3 personas:  

- 6 vieiras
- zumo de 1 naranja
- zumo de 1 pomelo rosa
- zumo de 1 limón
- 2 chalotas
- 2 puerros
- 100g de trozos de bacon en tacos
- aceite de oliva
- Sal y pimienta

Elaboración:

Lo primero de todo es limpiar bien las vieiras. Al abrirlas hay que tener cuidado para no hacernos daño.  Aquí tenéis un vídeo para ver cómo abrir y limpiar bien las vieiras. Yo quité la parte naranja porque me daba como repelús, pero veis que en el vídeo lo deja.

Mis vieiras antes de abrirlas

Limpiamos y cortamos las chalotas y los puerros muy finos. Las rehogamos en la sartén con el aceite de oliva a fuego bajo y cuando esté listo, añadimos el bacon. Hacemos un zumo con el limón, el pomelo y la naranja. Cuando esté todo listo, metemos en una copa bonita o un bol individual el sofrito y lo cubirmos con el zumo de cítricos. Justo antes de servir en la mesa, se pasan por la plancha o sartén las vieiras y se añaden a la copa. Queda un aperitivo exquisito.

On egin!

Suley

De cordero y caníbales (cordero asado)

Desde hace unas semanas el Metro de Madrid está forrado (no de dinero, no) de carteles y alfombras de plástico de la nueva serie de AXN "Hannibal". Una serie que se estrenó el jueves 11 de abril sobre el caníbal más famoso de la gran pantalla: Hannibal Lecter.

La película El silencio de los corderos siempre me ha traido sentimientos encontrados. Por un lado me parece una película buenísima pero luego me cago de miedo con algunas escenas. La primera vez que la vi era bien pequeña y aún corro o me cambio de acera cuando voy sola por la calle y veo una furgoneta. ¡No vaya a ser que me rapten y se hagan un abrigo con mi espalda!

Habré visto más de 20 veces como la agente Clarice Starling se sienta de frente al cristal de la celda en la que está encerrado el pirado del Dr. Lecter. Y se interrogan mutuamente para sonsacarse los recuerdos más escabrosos de la vida de ella y las ideas más macabras de Buffalo Bill. El resto de las secuelas no las he visto. La segunda empecé a verla pero me da una pereza Julianne Moore que se me quitan las ganas. Además la escena de la cabeza abierta mientras el coge trocitos de cerebro... puaj!! Es que solo de pensarlo se me quitan las ganas de todo. Como veis no son gran fan de las escenas sangrientas ni macabras. (El año pasado la 9ª muestra SyFy que hicieron en Madrid casi vomito con dos de las pelis). Así que me quedo con la primera de las películas y con ganas de ver la serie.

Pues tanto hablar de cordero, el otro día me animé a hacer un receta de mi querida madre. Tenía cordero lechal que me habían traido del pueblo y me quedó espectacular. La receta más sencilla no puede ser. Solo buen cordero, patatas y agua.

Cordero asado estilo Cheli

Ingredientes para 4 personas:

- 2 patas de cordero lechal
- 4 patatas
- agua
- aceite
- sal

Elaboración:

Precalentamos el horno a 200ºC. Ponemos las patas de cordero en una fuente y las metemos al horno durante 30 minutos aproximadamente. Unos 15 minutos de cada lado para que selle la carne.

Mientras tanto, cortáis las patatas en rodajas un poco gorditas y las freís y retiráis en papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. Cuando veáis que el cordero empieza a estar doradito, lo sacáis del horno y en la fuente ponéis una cama con las patatas. Encima de la cama de patatas ponéis el cordero, echáis agua (que se cubran las patatas) sazonáis y de nuevo al horno. Unos 20 minutos por cada lado. Si veis que se seca, echáis más agua. Veis que es muy fácil de preparar y queda riquísimo.

On egin!

Suley

De comida y cine

Cada año el día de Reyes en mi casa, a parte de los regalos y el rosco, es sinónimo de competición. Es el día del certamen de pintxos "Reinas de Borroto". Donde la creatividad y el valer culinario de cada participante lucha por conseguir el honor y la valiosa Copa Borroto. Este año, la temática fue pintxos de cine.

La preciada Copa Borroto

El primer pintxo era de una peli inventada. Vamos, por lo menos el resto no la conocía, y el Sr. Google tampoco. Era "La reina del mar". Una tempura de langostino tigre digna de cualquier barra de pintxos donostiarra. Creo que en realidad quería ser La reina de África pero la pobre se ahogó en el Mediterráneo de camino a Donosti y se quedó como reina del mar...

La reina del mar estará escondida bajo la lancha

El segundo pintxo ya fue sobre una película de verdad. Eso sí, pintxo inventado totalmente. Era "Pulp Fiction" en versión gallega. Una pistola de patata, un trozo de pulpo con sangre de pimentón y humo de caviar. Muy de película no me pareció a mi pero al jurado le convenció para darle el premio. La idea es captar el momento de violencia. Fijaos en el humo que sale de la pistola recién disparada sobre el pobre pulpo que sangra por el plato.

El humo coral es lo más

El tercer pintxo fue de la película/ documental "Supersize me". Unas mini hamburguesas con patatas fritas. Ay si el prota de la peli hubiera comido estas hamburguesas en vez de las del McDonalds!!!

Mini-hamburguesas Supersize me:

Ingredientes para 8 personas:
- 250 g de carne picada
- 8 panecillos de hamburguesa
 - un trozo de jengibre natural
- 2 lonchas grandes de queso chedar
- unas hojitas de lechuga
- 4 tomatitos cherry
- brotes de alfalfa
- patatas fritas paja de bolsa

La elaboración es tan sencilla como rallar jengibre encima de la carne y mezclarlo todo bien. Luego hacer unas bolas como para hacer albóndigas y aplastarlas. Cocinarlas a la plancha (o a la sartén en caso de no tener plancha) y ponerles encima el trocito de queso chedar (un cuarto de loncha por hamburguesa). Lavar la lechuga y los tomatitos y cortarlos por la mitad. Ya solo queda montar las hamburguesas y pincharlas con un pincho de brocheta para que no se desmoronen.

Los panecillos los compré en el supermercado de El Corte Inglés, aunque me han dicho que también hay en el Mercadona, pero yo no los encontré ese día. El jengibre hoy en día lo podéis encontrar en casi cualquier supermercado. Las patatas las metí en mini bolsas que hice yo misma con unos papeles de colorines que tenía por casa pero podéis utilizar cualquiera de colores como éstos. Los corté al tamaño que me pareció bien y listo. ¡¡A COMER!!


Buscando pintxos, nos dimos cuenta de que no era tan fácil encontrar recetas e ideas de comidas de pelis y pensé en dedicar el blog a lo que más me gusta: cocinar, el cine, las series y sobre todo el buen comer!!

On egin!

Suley